Turquía es un país que lo tiene todo: historia, cultura, gastronomía y naturaleza. Pero si hay algo que destaca especialmente en este destino son sus playas. La costa turca se extiende a lo largo de más de 8000 kilómetros y ofrece una gran variedad de paisajes y opciones para disfrutar del sol y el mar. Desde la Costa Turquesa, también conocida como la Riviera Turca o la Costa Licia, hasta la Costa del Mar Negro, pasando por la Costa Egea o la Costa del Mar de Mármara, viajar a Turquía supone tener una playa para cada gusto y ocasión. ¿Preparado para descubrir las maravillas de este país? ¡Pues sigue leyendo!
Índice de Contenidos
Cómo es la costa de Turquía
La costa de Turquía es una de las más largas y variadas del mundo. Se divide en cuatro zonas principales: la Costa Egea, la Costa Turquesa, la Costa del Mar Negro y la Costa del Mar de Mármara.
La Costa Egea se encuentra al oeste del país y se caracteriza por sus playas de arena fina y aguas cristalinas. Es una zona muy popular entre los turistas por su clima templado y su riqueza histórica y cultural. Algunos de los lugares más destacados de esta costa son Esmirna, la tercera ciudad más grande de Turquía; Bodrum, un antiguo puerto pesquero convertido en un centro turístico de lujo; o Éfeso, una de las ciudades antiguas más impresionantes del mundo.
La Costa Turquesa se sitúa al sur del país y se extiende desde el mar Egeo hasta el mar Mediterráneo. Es una región geográfica que comprende las provincias de Antalya, Muğla, Aydın y parte de Mersin. Su nombre se debe al color turquesa de sus aguas, que contrastan con el verde de sus montañas y el blanco de sus casas. Es una zona ideal para los amantes de la naturaleza y la aventura, ya que ofrece desde playas vírgenes hasta parques nacionales, pasando por ruinas griegas, romanas o licias. Algunos de los sitios más emblemáticos de esta costa son Antalya, la capital turística del país; Fethiye, un pintoresco pueblo con un puerto natural; o Ölüdeniz, una espectacular laguna azul rodeada de montañas.
La Costa del Mar Negro se ubica al norte del país y se distingue por su clima húmedo y su vegetación frondosa. Es una zona menos conocida y explotada turísticamente que las anteriores, pero que tiene mucho que ofrecer a los viajeros que buscan tranquilidad y autenticidad. Sus playas son de arena gruesa o piedra y sus aguas son más frías y oscuras que las del sur. Algunos de los lugares más interesantes de esta costa son Sinop, una ciudad con una larga historia y un encantador casco antiguo; Amasra, un pueblo pesquero con un castillo genovés; o Trabzon, una ciudad moderna y cosmopolita con una importante herencia bizantina.
La Costa del Mar de Mármara se localiza al noroeste del país y se caracteriza por su proximidad a Estambul. Es una zona que combina el ambiente urbano con el rural, y que ofrece playas de arena o roca y aguas tranquilas o agitadas. Algunos de los sitios más destacados de esta costa son Estambul, la ciudad que une Europa y Asia y que alberga monumentos como la Mezquita Azul o Santa Sofía; Bursa, la primera capital del Imperio Otomano y una ciudad con un gran patrimonio histórico y cultural; o Çanakkale, una ciudad que fue escenario de la batalla de Galípoli y que es la puerta de entrada a las ruinas de Troya.
Mejores playas de Turquía
Turquía tiene más de 400 playas con bandera azul, un distintivo que reconoce la calidad de sus aguas, su limpieza, su seguridad y sus servicios. Entre tanta oferta, es difícil elegir las mejores playas de Turquía, pero te resumimos algunas que no te puedes perder:
- Playa de Iztuzu: esta playa se encuentra en la provincia de Muğla, cerca del pueblo de Dalyan. Es una playa de arena dorada y aguas turquesas que tiene una particularidad: es el hábitat natural de las tortugas marinas Caretta caretta, que vienen a desovar entre mayo y octubre. Por eso, la playa está protegida y tiene un horario restringido. Además, es posible visitar el centro de conservación de las tortugas y aprender más sobre estas fascinantes criaturas.
- Playa de Patara: esta playa se sitúa en la provincia de Antalya, cerca del pueblo homónimo. Es una playa de arena fina y aguas claras que tiene una longitud de 18 kilómetros, lo que la convierte en la más larga de Turquía. Además, es una playa virgen y sin construcciones, ya que forma parte del parque nacional de Patara. Junto a la playa se pueden ver las ruinas de la antigua ciudad licia de Patara, donde nació San Nicolás.
- Playa de Ölüdeniz: esta playa se ubica en la provincia de Muğla, cerca del pueblo de Fethiye. Es una playa de arena blanca y aguas azules que forma parte de una impresionante laguna rodeada por montañas verdes. Es una playa muy popular entre los turistas por su belleza y por las actividades que se pueden hacer en ella, como el parapente, el kayak o el snorkel.
- Playa de Kaputaş: esta playa se localiza en la provincia de Antalya, entre los pueblos de Kaş y Kalkan. Es una playa pequeña pero espectacular, situada en un acantilado y con un acceso por unas escaleras. Su arena es suave y sus aguas son cristalinas y tienen un color turquesa intenso. Es una playa ideal para relajarse y disfrutar del paisaje.
- Playa del Valle de las Mariposas: esta playa se halla en la provincia de Muğla, cerca del pueblo de Ölüdeniz. Es una playa aislada y salvaje que se encuentra al final de un valle lleno de vegetación y mariposas. Su arena es gruesa y sus aguas son transparentes y tienen tonos verdes y azules. Es una playa perfecta para los amantes de la naturaleza y la tranquilidad.